última actualización: 3-01-2024
Los beneficios de la biomecánica en el ciclismo
La biomecánica aplicada al deporte es un área en pleno crecimiento. Algo que aún se hace más notorio en el mundo del ciclismo. No obstante, aunque cada vez sean más los deportistas que conocen este concepto y quieren aplicarlo a su día a día, la biomecánica es una ciencia muy compleja que hay que dejar en manos de los especialistas.
¿Qué es la biomecánica y cómo se aplica al ciclismo?
La biomecánica se define como la ciencia que estudia las fuerzas, aceleraciones y movimientos que actúan sobre los organismos vivos. Así, esta disciplina se centra en analizar la actividad de nuestro cuerpo en situaciones diferentes.
Cuando hablamos de biomecánica en ciclismo nos referimos a la reacción del cuerpo a las acciones físicas que se producen cuando este se encuentra en movimiento sobre la bicicleta, teniendo en cuenta que cada cuerpo es diferente. De este modo, tras la observación detallada de esta reacción y análisis de la misma, un técnico obtiene la información necesaria para adaptar la bicicleta al cuerpo de cada ciclista, así como a su pisada. Esto se denomina estudio biomecánico de ciclismo.
La importancia del estudio biomecánico
Los ciclistas profesionales tienen la obligación de someterse a un estudio biomecánico de ciclismo muy a menudo. Y no solo eso, sino que también es necesario que los técnicos de su equipo realicen este tipo de análisis cuando obtienen una bicicleta nueva o tras haber superado una lesión. Son muchos los factores que condicionan la comodidad y el rendimiento del ciclista.
Y no es solo el cuerpo del deportista lo que se tiene en cuenta en un estudio biomecánico ciclismo, sino también la disciplina que realiza. Cada modalidad tiene unas necesidades técnicas específicas.
No son solo los profesionales quienes se someten a la biomecánica. Muchos ciclistas de carácter amateur optan por adaptar sus bicicletas en talleres especializados para evitar las dolencias tras largos recorridos. De hecho, una de las características más destacadas de la sociedad actual es su preocupación por la salud y el bienestar. Antes de probar una bicicleta nueva recién adquirida, cada vez son más los que deciden someterse a un estudio de ergometría. Todo ello, para optimizar el producto y sentir plena comodidad.
¿Qué obtendrás tras realizar un estudio biomecánico?
Es común que tras largos recorridos en bicicleta, ya sea en montaña o en carretera, hayas notado leves dolores o molestias. Muchas personas se quejan de dolor en la pelvis, en las lumbares o en las rodillas el día siguiente de una ruta en bici. ¿Es eso normal? Lo cierto es que no debería ser así, y ahí entra en juego la biomecánica ciclismo. Escoger la talla adecuada de bicicleta es imprescindible, pero hay mucho más en lo que deberías fijarte, ya sea por el bien de tu salud, por mejorar tu rendimiento, o ambos.
1. Previene las lesiones musculares y articulares en todo el cuerpo
El tiempo que inviertes practicando un deporte como el ciclismo es mucho más prolongado que el que podrías dedicar a otras modalidades. Por ello es más común que sientas dolor o termines sufriendo alguna lesión. Nada que no se pueda evitar contando con una bicicleta perfectamente adaptada a tu cuerpo y a la fuerza que ejerces al pedalear.
El técnico que analice tus movimientos también adaptará el pedal y las calas a tu forma de pedalear, y te ofrecerá consejos para mejorar la pedalada. En este sentido, algunos ciclistas sienten demasiada carga en el cuádriceps, algo que sin duda puede evitarse con las correcciones pertinentes de la mano de un especialista.
2. Consigue la postura adecuada
El objetivo principal de la biomecánica aplicada al ciclismo es encontrar la posición ideal del cuerpo del ciclista al pedalear, creando así una simbiosis entre salud y rendimiento. Con todo ello, no solo se adaptan el manillar, el sillín y los pedales de la bici, sino que también se aportan consejos al deportista. Si te sometes al test biomecánico, tu experiencia sobre ruedas será totalmente cómoda y no sentirás dolor alguno a pesar de hacer largos recorridos.
En ciclismo de competición en carretera, por ejemplo, el deportista se posiciona algo más aerodinámico para evitar el roce con el viento y aumentar la velocidad. Esto se contempla en el estudio biomecánico del ciclista para que todo su cuerpo esté alineado y no sienta ninguna molestia.
3. Mejora tu rendimiento y disfruta del camino
Claro está que a mayor comodidad sobre tu bicicleta, mayor rendimiento. Uno de los beneficios que obtendrás tras someterte a un estudio biomecánico personalizado es que al colocarte y pisar de forma adecuada, ejercerás más fuerza ahorrando energía. Y ello te proporcionará una mayor velocidad con menor cansancio.
Además, contar con una bici totalmente adaptada a ti te permitirá conseguir una concentración mucho mayor. Con todo ello, lograrás una mejor experiencia sobre ruedas en la que tu bicicleta y tú seréis uno.
Los medios para realizar un test biomecánico, como el rodillo en el que se calculará el ángulo de tu pierna en la pisada, son herramientas optimizadas tecnológicamente que proporcionan unos resultados inmejorables. Además, nuestros técnicos te proporcionarán toda la información para que tu experiencia sobre la bici sea brillante.
Ahora que ya conoces los beneficios de la biomecánica en ciclismo, solo tienes que dejar el resto en nuestras manos para empezar a sentir sus ventajas.
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